Como reflejo de la situación social, la ciudadanía ha aumentado sus exigencias ante la actuación profesional de los abogados; las personas demandan mayor información, más detallada y clara, así como un conocimiento preciso de las consecuencias económicas de cualquier proceso judicial. Estas exigencias hacen necesario un esfuerzo constante en el trato y la comunicación con el cliente, con el fin de lograr la mayor satisfacción de esta relación.
En este sentido, durante el año 2013 se ha experimentado un aumento en el número de reclamaciones respecto a 2012, si bien un 66,66% de las mismas se han archivado; no toda disconformidad con el profesional tiene encaje en el examen deontológico de su conducta. Éstos son los resultados de la estadística:
- 144 reclamaciones (58 del turno de oficio)
- 75 reclamaciones de particulares
- 1 reclamación desde el juzgado
- 7 reclamaciones entre letrados
- 3 reclamaciones por otros motivos
- 11 expedientes informativos (5 archivados, 4 a disciplinario, 2 en tramitación al cierre del ejercicio)
- 29 expedientes disciplinarios (6 archivados, 8 con sanción, 15 en tramitación al cierre del ejercicio)
(Datos: memoria anual 2013 del MICAP).